Tanto si eres un estilista profesional de las estanterías como si sólo necesitas un poco de espacio extra para guardar los artículos necesarios, es innegable que una estantería blanca es una bendición cuando los metros cuadrados son escasos.
Por suerte, hay una gran variedad de estanterías de pared y otros tipos de estanterías que hacen justicia a tu objetivo final, ya sea estilizar o simplemente almacenar. Lee para inspirarte, desde los soportes fijos de la vieja escuela hasta los diseños colgantes más elegantes.
#1: Estantes de pared con soportes fijos
Las estanterías con soportes fijos son probablemente una de las disposiciones más comunes, entre otras cosas porque también se consideran las más seguras. En este sistema, los soportes se fijan a las paredes y los estantes se fijan a ellos.
La ventaja de este sistema es que, al estar fijado a la pared, es menos probable que se caiga o se rompa. Es una gran opción para casas con niños pequeños o mascotas.
#2: Estantes de pared flotantes
A diferencia de las estanterías con soportes fijos, las estanterías flotantes no tienen ningún soporte visible, por lo que parece que están suspendidas en la pared por sí solas. Estos estantes son fáciles de construir y son una bendición para aquellos que no quieren soportes gruesos o ganchos estropeando sus paredes.
Si se fijan con seguridad y son del material adecuado, los estantes flotantes de pared son estables y pueden soportar una cantidad decente de peso.
#3: Estantes empotrados
Esta estantería blanca aprovecha funcionalmente los huecos existentes. Las estanterías empotradas se construyen literalmente en un rincón o hendidura, utilizando las paredes existentes de la alcoba como soporte.
Dependiendo del espacio que tengas, puedes instalar varias estanterías y añadir un marco o puertas para asegurar aún más lo que expones. Si se trata de una esquina sin salida, puede utilizar esta idea para crear estantes de pared curvos, utilizando las dos paredes como soporte.
#4: Estantes de pared colgantes
Como su nombre indica, las estanterías colgantes son estantes suspendidos en tubos, cuerdas u otras formas de soporte. Añaden al instante un toque dramático a una habitación.
Estas estanterías de pared varían en función del estilo que elijas: las estanterías industriales utilizan madera y tubos, mientras que las cuerdas y los tablones de madera clara canalizan las vibraciones bohemias.
#5: Estantes independientes
Las estanterías independientes pueden apoyarse en la pared o colocarse en el suelo. Se utilizan mejor como estanterías, pero también pueden servir de expositores para viñetas y chucherías.
El tipo clásico de estantería independiente tiene el respaldo recto y está hecho de metal; sin embargo, también puede optar por las variantes inclinadas de madera si quiere algo más moderno.
#6: Estanterías de escalera
Las estanterías de escalera son otra forma divertida de arreglar su espacio a la vez que añade almacenamiento. Estos tipos de estanterías se asemejan a las escaleras en su construcción. Dependiendo del estilo que elija, los “peldaños” son de igual tamaño o se hacen más grandes de arriba a abajo.
Este último estilo es ideal para acomodar artículos de diferentes formas y tamaños. Además, las estanterías de escalera proporcionan la estabilidad de las estanterías ancladas sin tener que hacer agujeros en la pared.
#7: Estanterías abiertas y cerradas
Este diseño de estantería blanca ha surgido de la estantería de almacén industrial. Pero a diferencia de una estantería de almacén, no está completamente desnuda. Este tipo de estantería suele venir en marcos metálicos con algunas unidades cerradas y algunos estantes abiertos.
Así, puede utilizarse para almacenar y exponer. También son excelentes tabiques funcionales.